El ciclo vital se entiende como un conjunto de etapas que se suceden a través del tiempo. Se inicia con un compromiso, la unión de una pareja y se va estructurando o afianzando hasta llegara su disolución.
Cada etapa del ciclo vital, supone una diversidad de ajustes o adaptaciones necesarias para crecer y aproximarse a un un nivel más complejo de vida.
Las etapas se pueden determinar como:
- Formación: Está enmarcada desde el noviazgo, en el que las personas se conocen, comparten cada vez más, en medio de creativos galanteos. Sigue con el matrimonio (o unión) sin hijos, que supone nuevos roles y expectativas. Además, requiere aprender a compartir en pareja sin perder la individualidad, acordar tiempos en común, ajustar nuevas obligaciones. Es posible que se incurra en la idealización del otro. Esta etapa permite desarrllar patrones de comunicación verbal y no verbal más elaborados.
- Expansión: Inicia con la espera del primer hijo. Es la vivencia de los padres en compañía de su ninño lactante y luego convertido en un preescolar (3-5 años). La estructura familiar indudablemente se modifica, se generan nuevas adaptaciones, necesidades emocionales diferentes. Fácilmente se cae en la sobreprotección de los pequeños. La tarea evolutiva que supone esta etapa, es la de buscar una tríada armónica. Es posible que se presenten ciertas rivalidades y desplazamientos entre los miembros de la pareja y que se reformulen las relaciones con los miembros de la familia extensa.
- Consolidación: La familia cuenta con hijos escolares y adolescentes (6-18) . Los hijos empiezan a delimitar sus derechos y deberes, la igualdad entre los mismos. Las funciones familiares se actualizan, de tal forma que a los padres les toca aprender que las relaciones más fuertes de sus hijos se hallan alrededor del mundo externo. Por otra parte, cada hijo está en búsqueda de su propia identidad y libertad. Requieren entender que ya son seres sexuales y en virtud de ello inician relaciones cada vez más estrechas. Los padres pueden entrar en procesos como bloquear o retener a los hijos o aprender a soltar y emprender comunicaciones más profundas y comprensivas con ellos.
- Apertura: Empieza con la salida del primer hijo y termina con el último hijo que se retira del hogar. Hay una emancipación que exige nuevas formas de comunicación y vinculación afectiva. Se da con frecuencia la entrada y salida de nuevos miembros a las familias (yernos, nueras). Puede generarse una fuerte crisis cuando los hijos se han retenido en casa.
- Postparental: La familia empieza a envejecer, se presentan eventos como la jubilación, el nido vacío, la muerte del primer cónyuge. Hay una clara satisfacción por la independencia y los logros de los hijos. Se disfruta de la pareja. Es posible que se genere cierta crisis por el nido vacío (la partida de todos los hijos). Una gran oportunidad, la constituye generar fuertes redes de apoyo con la comunidad.
- Disolución: El primer cónyuge muere y le sigue en los años venideros la muerte del otro miembro de la pareja. Son típicos los procesos de duelo, enfrentar la enfermedad, la soledad, la invitación de la vida a aceptar la realidad inevitable de la muerte propia y la de los seres amados. Es una etapa en la que se siente la necesidad de hacer revisión de la vida, integrar todo lo aprendido en un acto de sabiduría.
Para reflexionar:
Ciclo vital |
Mientras pensaba que estaba aprendiendo a vivir, he aprendido cómo morir. Leonardo Da Vinci |
Ya la muerte sucede cada día es fatal, terminante, inexorable el transcurso del tiempo inevitable hace trizas belleza y lozanía
Nada puedes hacer para impedirlo este mismo momento ya es pasado son recuerdos los seres más amados estrellitas que brillan en el cielo Es el ciclo vital, innegociable y por eso disfruta intensamente el amor y la dicha consecuente son preciados placeres invaluables Ser feliz es lo único importante saborear lo dulce del momento luce libre y osado como el viento regocijo procura en cada instante Ningo http://www.ningo.com.ar |